VATICANO,
En su discurso este mediodía (hora local) a los miembros de la Asociación Santos Pedro y Pablo, el Papa Benedicto XVI resaltó la importancia vital de la fidelidad a Cristo y a la Iglesia, y alentó a soportar con humildad y paciencia el "precio" que ello conlleva.
En su discurso a los miembros de esta asociación que participaron en la Misa que presidió el Cardenal Tarcisio Bertone, Secretario de Estado Vaticano, en ocasión del 40 aniversario de esta fundación fundada por el Papa Pablo VI, el Papa recordó que esta institución venera a Santa María como la Virgo Fidelis y exclamó que "¡hoy más que nunca hay necesidad de fidelidad!"
"Vivimos en una sociedad que ha perdido este valor. Se exalta mucho la actitud de cambio, la ‘movilidad, ‘la flexibilidad', por motivos económicos y organizativos aun legítimos ¡Pero la cualidad de una relación humana se percibe en la fidelidad!"
La Sagrada Escritura, agregó, "nos muestra que Dios es fiel. Con su gracia y la ayuda de María, sed pues fieles a Cristo y a la Iglesia, dispuestos a soportar con humildad y paciencia el precio que ello conlleva".
Según señala la nota de Radio Vaticana, con profunda gratitud por el servicio de voluntariado litúrgico –en las celebraciones en el Vaticano– y caritativo –en numerosas iniciativas colaborando con las Hijas de la Caridad y con las Misioneras de la Caridad– el Papa hizo hincapié en la importancia de una intensa y renovada vida espiritual.
Benedicto XVI explicó que "para ayudar a los demás a rezar, hay que tener el corazón dirigido hacia Dios; para llamarlos al respeto de los lugares santos y de las cosas santas, debemos tener en nosotros el sentido cristiano de la sacralidad; para ayudar al prójimo con verdadero amor cristiano, debemos tener un alma humilde y una mirada de fe".