VATICANO,
El Presidente del Pontificio Consejo de la Pastoral para los Migrantes e Itinerantes, Mons. Antonio María Veglio, afirmó que las migraciones no son una amenaza para los países y pidió más bien fomentar la solidaridad hacia las personas que dejan sus naciones en busca de un futuro mejor.
"La movilidad humana, al contrario de lo que se dice, no es fundamentalmente una amenaza que viene a turbar la vida normal de los países y de la comunidad internacional". "El uso de términos como irregulares, ilegales, clandestinos, expulsiones y similares puede dar una idea errada del asunto", afirmó este miércoles.
Según informó Milenio, el Prelado dijo durante una conferencia en Roma que la falta de posibilidades para acceder a una vida digna, provoca que miles de personas miren la migración como una solución.
Mons. Veglio también recordó a los católicos que la identidad cristiana y tradición occidental llama a recibir "aquello que es distinto, sin encuadrarlo negativamente".
"Si no se evita este riesgo se cae en prejuicios que pueden afectar la convivencia, que se debe basar sobre el encuentro, el diálogo y la mediación, siempre en el respeto de las normas fundamentales del país de recepción", advirtió.
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