VATICANO,
En sus palabras luego del rezo del Regina Caeli este domingo en la Plaza de San Pedro, el Papa Benedicto XVI encomendó la causa de la paz en el mundo al sacerdote Alois Andritzki, mártir asesinado por los nazis en 1943, a los 28 años de edad, durante la Segunda Guerra Mundial, que este 13 de junio será beatificado en Alemania.
El Santo Padre señaló que "alabamos al Señor por este heroico testigo de la fe, que se añade a la fila de cuantos han dado la vida en el nombre de Cristo en los campos de concentración. Querría encomendar a su intercesión, hoy que es Pentecostés, la causa de la paz en el mundo".
El Papa hizo votos para "que el Espíritu Santo inspire valerosos propósitos de paz y sostenga el empeño de llevarlos adelante, a fin de que el diálogo prevalezca sobre las armas y el respeto de la dignidad del hombre supere los intereses de parte".
Finalmente hizo votos para que "el Espíritu, que es vínculo de comunión, enderece los corazones desviados por el egoísmo y ayude a la familia humana a redescubrir y custodiar con vigilancia su unidad fundamental".
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