ROMA,
El sacerdote argentino Pedro Opeka, misionero en Madagascar (África), viajó a Roma (Italia) para dar testimonio de su experiencia como misionero y sensibilizar al mundo sobre la posibilidad de erradicar la pobreza. "¡Los pobres me han evangelizado!", exclamó.
El sacerdote ofrece esta semana tres conferencias en Roma bajo el título "Vencer la pobreza: el testimonio del Padre Pedro".
Desde la Pontificia Universidad San Tomás de Aquino Angelicum, Padre Pedro explicó a ACI Prensa que desea enviar el mensaje del Evangelio al mundo para que "todos en esta Tierra, en este planeta seamos hermanos, que nos ayudemos los unos a los otros. No puede ser que en este mundo que hay tantas riquezas haya un millar de personas que viven con el hambre en el estómago, es una injusticia que grita el cielo".
El Padre Pedro, quien vive en Madagascar desde hace 40 años, recordó que "es todo un continente el que sufre, África y Madagascar".
"Yo levanto la voz y grito ¡basta!, basta de discursos, ¡tenemos que obrar, tenemos que actuar y ayudar al continente que tiene hoy millones de niños que están en peligro y que mueren por razones por las que no deberían morir!".
"Mi mensaje es de solidaridad, compartir lo que tenemos, porque las riquezas que tenemos nos han sido dadas para compartirlas, porque lo que yo no necesito se pierde, hay un proverbio indio que dice eso, ¿por qué guardar algo si hay un hermano que lo necesita?".