ROMA,
La agencia vaticana Fides informó que algunas organizaciones no gubernamentales de Tayikistán (antigua Unión Soviética) denunciaron que un número creciente de huérfanos y niños de la calle son reclutados por grupos extremistas islámicos quienes los adoctrinan en ideologías radicales para convertirlos en futuros terroristas.
Según cifras oficiales el 35 por ciento de la población total (más de 7 millones de habitantes) es menor de 14 años de edad. Las organizaciones no gubernamentales en Tajikistán informaron que más de 9 000 niños y adolescentes viven en las calles y 5 000 de ellos se encuentran en la capital Dushanbe.
Los niños y jóvenes son víctimas de la violencia, las enfermedades, la prostitución, tráfico de drogas, además de ser reclutados por los grupos extremistas islámicos.
Fides explicó que las estructuras de acogida promovidas por el gobierno no son suficientes. En 2003 la Iglesia Católica abrió un centro en Dushanbe y un comedor para niños de la calle.
Sin embargo una vez que alcanzan la mayoría de edad los jóvenes se ven de nuevo en "la calle", perdiendo todo derecho a la asistencia social pública.
"Su condición juvenil de pobreza se convierte en un terreno sobre el que pueden prosperar, y con frecuencia tienen éxito, las invitaciones de los grupos terroristas que prometen una vida mejor, más comodidad y bienestar y les ofrecen, además, motivaciones morales para comprometerse con una causa", informó Fides.