VATICANO,
El Papa Benedicto XVI señaló esta tarde que los laicos católicos deben participar, en primera persona, en la vida pública y política para ofrecer su necesaria contribución a la sociedad, formados a partir de la Doctrina Social de la Iglesia que los purifique de la "sed de poder".
Así lo indicó el Papa en su discurso luego de presidir el rezo del Rosario con los obispos italianos en ocasión del 150° aniversario de la unidad del país, en el que se meditó los misterios luminosos instituidos por el Beato Juan Pablo II.
El Santo Padre dijo también a los obispos: "no dudéis en estimular a los fieles laicos a vencer todo espíritu de cerrazón, distracción e indiferencia y a participar en primera persona en la vida pública".
A los prelados que celebran su asamblea plenaria desde el lunes, el Papa alentó a "animar las iniciativas de formación inspiradas en la Doctrina Social de la Iglesia, para quien está llamado a la responsabilidad política y administrativa no sea víctima de la tentación de explotar la propia posición para intereses personales o sed de poder".
En la Basílica romana de Santa María la Mayor, indica la nota de Radio Vaticana, Benedicto XVI destacó que cada uno de los católicos miembros de la Iglesia debe promover y tutelar la vida humana en todas sus fases, sostener a la familia.
Asimismo exhortó a los que participan en la política y al mundo empresarial a que hagan todo lo que esté a su alcance para superar la precariedad en el trabajo, "que en los jóvenes compromete la serenidad de un proyecto de vida familiar, con un grave daño para un auténtico desarrollo y armónico de al sociedad".