ROMA,
Este martes 24 de mayo, fiesta de María Auxiliadora, los católicos del mundo celebraron el Día de Oración por la Iglesia en China, mientras que el gobierno chino restringió el acceso de los fieles al Santuario de Nuestra Señora de Seshan en Shangai y canceló la celebración de la Misa en otros lugares del país.
En declaraciones a ACI Prensa, el P. Pietro Cui, sacerdote a cargo de la pastoral de los católicos chinos en Italia, indicó que "el Santuario de Nuestra Señora de Seshan es muy importante para nosotros. Ella es nuestra Virgen, la Virgen de China. He escuchado que los peregrinos no pudieron asistir libremente allí. Ha habido problemas en ese lugar".
Pese a las restricciones, indica Radio Vaticana, unos 10 000 católicos llegaron hasta el santuario.
El sacerdote también comentó que los católicos en China "no pueden celebrar Misa libremente" y describió como "normales" estas restricciones a las que los fieles ya están acostumbrados. "No hay Santa Misa porque el gobierno dice que no puede haber", precisó.
El P. Cui dijo también a ACI Prensa que el Papa Benedicto XVI, con el Día de Oración por la Iglesia en China que estableció en el año 2007 en su carta a los católicos del país, "ha hecho un llamado especial por la gente de China y debemos agradecerle por eso porque es muy importante, y es fundamental también que el mundo sepa que este día es importante para los católicos".
"Para nosotros como comunidad –añadió– el Papa es como un padre que ama a sus hijos".