VATICANO,
Al recibir este mediodía (hora local) a los alumnos de la Pontificia Facultad Teológica "Teresianum" de Roma en ocasión de su 75° aniversario, el Papa Benedicto XVI exhortó a la práctica de la dirección espiritual para que todos los católicos crezcan cada vez más en "apasionada capacidad de amar y servir a la Iglesia".
En su discurso en italiano el Santo Padre señaló que "como nunca ha dejado de hacer, también hoy la Iglesia sigue recomendando la práctica de la dirección espiritual, no solo a quienes desean seguir al Señor de cerca, sino a todo cristiano que quiere vivir con responsabilidad el propio Bautismo, es decir la vida nueva en Cristo".
El Santo Padre afirmó que "cada uno, y de modo particular quienes han acogido la llamada de Dios para seguirle más de cerca, tienen necesidad de ser acompañados personalmente por un guía seguro en la doctrina y experto en las cosas de Dios".
Este guía debe estar en la capacidad de "ayudar a protegerse de subjetivismos simples, poniendo a disposición la propia riqueza de conocimientos y experiencias vividas en el seguimiento de Jesús".
Refiriéndose a la espiritualidad carmelita de la Pontificia Facultad Teológica "Teresianum", el Papa subrayó "el vasto movimiento de renovación que se originó en la Iglesia fruto del testimonio de los santos Teresa de Jesús y Juan de la Cruz. Suscitó el resurgimiento de ideales y de fervor de vida contemplativa que en el siglo XVI, inflamó, por decir así, Europa y el mundo entero".
Dirigiéndose a los estudiantes, el Santo Padre resaltó que "en la estela de este carisma se sitúa el trabajo de profundización antropológica y teológica, la tarea de penetrar en el misterio de Cristo, con la inteligencia del corazón, que es a la vez un conocer y un amar; esto exige que Jesús se sitúe en el centro de todo, de vuestros afectos y pensamientos, de vuestro tiempo de oración, de estudio y de acción, de toda vuestra vida".