Los obispos de Estados Unidos enviaron una carta al Senado de Estados Unidos en la que recuerdan que "la medida moral del debate sobre el presupuesto no está dada por el partido ganador o qué intereses prevalezcan sino más bien cómo serán tratados los que están desempleados, hambrientos, sin hogar o los pobres".
En la misiva, con fecha 5 de mayo, los obispos reconocen las "decisiones difíciles sobre cómo equilibrar las necesidades y los recursos y asignar las cargas y los sacrificios" que el Congreso y la Administración deben tomar, pero insisten en que las dimensiones morales y humanas de esas decisiones deben ser abordadas en el debate presupuestario en curso en el país.
La carta está firmada por Mons. Stephen E. Blaire, Obispo de Stockton, California, presidente del Comité Episcopal sobre la Justicia Nacional, y Mons. Howard J. Hubbard, Obispo de Albany, Nueva York, presidente de la Comisión de Justicia y Paz Internacional.
En la carta ofrecen varios criterios morales basados en la doctrina social católica para ayudar a guiar las decisiones presupuestarias difíciles.
Aunque los obispos no ofrecen una crítica de la totalidad de las propuestas detalladas para el presupuesto, piden los senadores a tener en cuenta la dimensión humana y moral ante las varias decisiones claves que enfrenta el Congreso.
"El acceso a la atención sanitaria, que afirma la vida y la salud sigue siendo una prioridad nacional urgente. Reconocemos que los costos crecientes de Medicare, Medicaid y otros programas de beneficios deben ser abordados, pero instamos a proteger las necesidades de las familias pobres, trabajadoras y de las personas vulnerables".