SANTIAGO,
El Secretario General de la Conferencia Episcopal Chilena (CECH), Mons. Santiago Silva, presentó este martes el Protocolo ante Denuncias contra Clérigos por abusos de menores, y anunció la conformación del organismo del Episcopado que orientará y dirigirá las políticas de prevención y de ayuda a las víctimas.
“Queremos hacer cuanto sea necesario –con caridad, pero con justicia– para evitar los males que provienen de las graves faltas que algunos ministros de la Iglesia pueden cometer contra los más pequeños y particularmente las relacionadas con el sexto mandamiento del Decálogo, que ofenden a Dios”, dijo a la prensa.
Este documento fue aprobado por los obispos y actualiza el del año 2003. Además toma las nuevas normas de la Santa Sede y de las experiencias vividas por la Iglesia en Chile.
“En síntesis, el Protocolo promueve que desde la Iglesia se facilite la investigación de todos los hechos que lleguen a conocimiento de las autoridades eclesiásticas, en un tiempo razonable, sin exigir demasiadas formalidades y acogiendo la colaboración de los laicos”, explicó el portavoz de la CECH, Jaime Coiro.
Mons. Silva condenó los casos de abusos sexuales porque “causan un gravísimo daño a la unidad de la Iglesia y escandalizan al Pueblo de Dios, particularmente a los más amados de Jesús, los más pequeños y los más pobres, a la par que representan un profundo atentado al bien común”.
El Prelado reiteró que no hay lugar en el sacerdocio para quienes abusan de menores y que nada justifica este delito. “Es total nuestro compromiso de velar incesantemente porque estos gravísimos delitos no se repitan”, afirmó.