GINEBRA,
El representante de la Santa Sede ante la Oficina de la ONU en Ginebra, Mons. Silvano Tomasi, recordó ante este organismo que quienes atacan a los que tienen opiniones contrarias al comportamiento homosexual violan el derecho a la libertad de expresión.
El Arzobispo intervino durante la discusión del ítem 8, "Orientación sexual", en la XVI sesión del Consejo de los Derechos Humanos, y mostró su preocupación ante la "alarmante tendencia" de "atacar a personas por tomar posiciones de no apoyar las conductas sexuales entre personas del mismo sexo".
Mons. Tomasi afirmó que la Iglesia no justifica en ningún caso la violencia contra nadie con motivo de sus preferencias o conductas sexuales, pero también advirtió que en las leyes internacionales, el término "orientación sexual" se refiere a sentimientos y pensamientos y no a conductas. Por ello, advirtió, no están justificados los ataques contra quienes se oponen a determinadas conductas sexuales, en virtud de la libertad de expresión y de creencia.
"Cuando ellos expresan sus creencias morales o sus creencias sobre la naturaleza humana, que pueden ser también expresiones de convicciones religiosas, u opiniones del Estado sobre reivindicaciones científicas, son estigmatizados, o peor aún, son vilipendiados y perseguidos".
"La Santa Sede aprovecha esta oportunidad para afirmar la dignidad y el valor de todos los seres humanos, y para condenar la violencia dirigida contra las personas a causa de sus sentimientos y pensamientos sexuales, o comportamientos sexuales", agregó.
El Prelado afirmó que se está produciendo una "confusión innecesaria" sobre el significado del término "orientación sexual", que según la legislación internacional vigente, se refiere a "sentimientos y pensamientos", y no a "conductas".