ROMA,
El Presidente Emérito del Pontificio Consejo para la Promoción de la Unidad de los Cristianos, el Cardenal alemán Walter Kasper, señaló que "el celibato es un testimonio del seguimiento radical de Cristo" que guardan los sacerdotes.
En la homilía de la Misa de acción de gracias por su labor a la cabeza del dicasterio que acaba de dejar hace unos días, el Cardenal respondió a una carta firmada por 143 teólogos disidentes de Austria, Suiza y Alemania que solicitan admitir sacerdotes casados y darles a las mujeres un papel "más protagónico".
La carta de los teólogos disidentes afirma que es hora de "un nuevo comienzo" en el que se debe admitir el sacerdocio casado para hacer frente a los abusos sexuales en la Iglesia porque, debido a ellos, muchos han "privatizado su fe".
En la Misa que celebró el domingo 6 de febrero en la iglesia romana de Santa María dell’Anima, el Cardenal señaló que "leyendo los diarios se tiene la impresión de que la mayoría es contraria (al celibato). Me alegra decir que no pertenezco a ella".
El Cardenal Kasper explicó además que "el celibato es un testimonio del seguimiento radical de Cristo, como debería ser, en particular para los sacerdotes. Es el signo que existe para Cristo para el Reino de Dios".
Comentando el Evangelio sobre la necesidad de que los cristianos sean sal de la tierra y luz del mundo, el Cardenal precisó que el celibato de los sacerdotes, consagrados y religiosos "es esa pizca de sal, que no todos pueden ser pero que hace bien a todos. ‘Adaptarse’ no ayuda".