MÉXICO D.F.,
El P. José de Jesús Aguilar, especialista en religiosidad popular, pidió a los fieles no dejarse guiar por modas u ocurrencias –como vestir al Niño Dios de charro–, porque se corre "el riesgo de confundir una imagen sagrada con un juguete".
En declaraciones al Sistema Informativo de la Arquidiócesis de México (SIAME) el 31 de enero, el sacerdote se refirió a la costumbre de vestir la imagen del Niño Dios para presentarlo durante la fiesta de la Candelaria el 2 de febrero.
"La Iglesia siempre ha enseñado que las imágenes del Niño Dios deben ser bellas, dignas y tratadas con decoro, porque nos recuerdan que Cristo nació, fue niño y creció entre nosotros", recordó el SIAME.
En ese sentido, el P. Aguilar pidió a quienes ofrecen sus servicios para vestir estas imágenes, no dejarse llevar solo por el interés económico porque terminan promoviendo "novedades" contrarias al respeto religioso, como las vestimentas de equipos de fútbol o incluso de la "santa muerte".
El sacerdote también se dirigió a quienes gustan vestir al Niño Dios de santo. "Por muy ejemplares que sean para nosotros los santos, no debemos confundirnos y no debemos ‘disfrazar’ a Cristo de santo"; al recordar que "son los santos quienes buscan parecerse a Jesús y no al revés.
El P. Aguilar dijo que los fieles pueden ponerle a su Niño Jesús el traje de una advocación, como de Niño de las Palomitas, de Nazareno, de Sagrado Corazón, de Cristo Rey, de Cristo Sacerdote, de Buen Pastor, etc.