ROMA,
El Obispo de Faisalabad y Presidente de Caritas Pakistán, Mons. Joseph Coutts, denunció las desastrosas condiciones en que se encuentra el país seis meses después de las peores inundaciones de su historia y pidió ayuda para los damnificados.
Según publicó el 31 de enero la agencia MISNA, Mons. Coutts explicó que "Pakistán no ha recibido suficiente ayuda para hacer frente a las consecuencias de las inundaciones y la reconstrucción". En algunas áreas, particularmente en el sur, la población sigue privada de servicios básicos, como el acceso al agua potable o a los alimentos.
Mons. Coutts recordó que casi 20 millones de personas fueron afectadas por las inundaciones. Explicó que para posibilitar la ayuda a todo el país "se necesitaría mucho más dinero".
En el país mayoritariamente musulmán, Caritas Pakistán es la organización católica que asiste a los necesitados. Mons. Coutts explicó a Caritas Internationalis que en su ayuda no existe "ninguna distinción en base a la lengua, la fe, la religión u otras diferencias", y que su trabajo es bien aceptado por todos los pakistaníes.
Asimismo, Mons. Coutts explicó las tres áreas de acción de Caritas en el país asiático: refugio para los desplazados, sanidad y alimentación. "Muchos campos de cultivo fueron destruidos, y muchas cabezas de ganado murieron", se suministraron fertilizantes y también nuevos animales vacunados para la reproducción. "En el campo de la sanidad trabajamos especialmente para la purificación del agua", concluyó.