VATICANO,
Al presidir el rezo de las Vísperas ayer por la tarde con los universitarios romanos en su tradicional encuentro antes de Navidad, el Papa Benedicto XVI resaltó que es posible un diálogo fructífero entre la fe cristiana y los distintos saberes en las universidades, pues no se oponen sino que se complementan.
En la Basílica de San Pedro el Papa dijo que "a vosotros, universitarios, que recorréis el camino fascinante y trabajoso de la búsqueda y la elaboración cultural, el Verbo encarnado os pide que compartáis con él la paciencia de construir. Construir la existencia propia, la sociedad, no es una obra que puedan realizar mentes y corazones distraídos ni superficiales".
"En nuestros tiempos se siente la necesidad de una nueva clase de intelectuales capaces de interpretar las dinámicas sociales y culturales que no ofrezcan soluciones abstractas, sino concretas y realistas. La Universidad está llamada a desempeñar este papel insustituible y la Iglesia la sostiene convencida".
La comunidad universitaria romana, compuesta por instituciones estatales, privadas, católicas y pontificias debe desempeñar, dijo el Papa, "una notable tarea histórica: la de superar incomprensiones y prejuicios que a veces impiden el desarrollo de una cultura auténtica".
"Trabajando en sinergia, en particular con las facultades teológicas, las universidades romanas pueden indicar que es posible una colaboración y un diálogo nuevos entre la fe cristiana y los saberes diversos, sin confusión ni separación, sino compartiendo la misma aspiración de servir al ser humano en su plenitud".
Sobre la Navidad, el Papa señaló que "el Dios de Abraham se ha revelado, ha mostrado su rostro y ha tomado morada en nuestra carne en Jesús, hijo de María –verdadero Dios y verdadero hombre–, al que encontraremos una vez más en la gruta de Belén".