LA PAZ,
La Conferencia Episcopal Boliviana (CEB) expresó su respaldo y preocupación por el Arzobispo de Cochabamba, Mons. Tito Solari, quien ha sido amenazado y atacado por diversos sectores del partido de gobierno tras expresar su honda preocupación por el problema del narcotráfico en esta zona del país. A los prelados se han sumado miles de católicos del país y personalidades como el ex Presidente de Bolivia, Víctor Hugo Cárdenas.
El pasado 18 de noviembre el Arzobispo expresó ante los medios su profunda preocupación como pastor por el problema del narcotráfico que afecta a los jóvenes de la región del trópico de Cochabamba en la zona del Chapare; algunos de los cuales lamentablemente se dedican a la venta de cocaína.
Asimismo recordó que en esta posición concuerda con lo expresado en diversas ocasiones por el Presidente Evo Morales quien ha reconocido que "las fuerzas del narcotráfico son más fuertes que nuestras fuerzas y rompen nuestra soberanía".
Tras estas declaraciones, diversos miembros del partido de gobierno MAS, dirigentes de la zona del trópico de Cochabamba en las zonas del Chapare, Villa Tunari, Chipiriri e Isinuta le exigieron pruebas de lo dicho o su retractación "por haber ofendido a las comunidades" de la zona y "a la juventud local", dándole un plazo de 48 horas que se cumplen hoy.
Ante esta situación la CEB indicó en el comunicado que la intención de Mons. Solari "no ha sido sentar una denuncia y su palabra no ha pretendido criticar y menos atacar a nadie, sino hacerse eco de la inquietud de agentes de pastoral, educadores, padres de familia y jóvenes por la grave amenaza del narcotráfico en el Chapare".
"Expresar una preocupación como pastor basada en su propia experiencia y en testimonios de los propios pobladores no implica presentar pruebas tal como se le pide, pues ésa es tarea de las autoridades responsables", añade el texto.