VATICANO,
Al recibir esta mañana las cartas credenciales de la nueva embajadora de Eslovenia ante la Santa Sede, Maja Marija Lovrenčič Svetek, el Papa Benedicto XVI señaló que la misión específica de la Iglesia Católica "en cualquier parte del mundo, es proclamar el Evangelio y llevar a todos los seres humanos la salvación que viene del Señor Jesús".
"La integración de la nación eslovena en la Unión Europea, lograda en estos últimos años, de forma cada vez más orgánica, tiene entre sus supuestos fundamentales las comunes raíces cristianas del viejo continente".
El Papa dijo que "en la historia del pueblo esloveno emerge con evidencia la huella de los valores morales y espirituales del cristianismo. Este patrimonio ha sido, incluso en los momentos más difíciles y dolorosos, un fermento constante de consuelo y esperanza, y ha sostenido a Eslovenia en su camino hacia la independencia, después de la caída del régimen comunista".
Seguidamente Benedicto XVI indicó que en esas circunstancias "la Santa Sede estuvo particularmente cerca de la nación eslovena", y subrayó, citando el discurso de la embajadora, que "las relaciones entre la República de Eslovenia y la Santa Sede han sido buenas desde el principio y siguen siéndolo hoy en día". "Por tanto, espero que en este contexto se puedan resolver todas las problemáticas aún no resueltas con el Acuerdo firmado el 14 de diciembre 2001", añadió.
"En el ejercicio de las prerrogativas democráticas, Eslovenia ha conseguido un determinado bienestar económico que ha permitido la consolidación de una convivencia pacífica, civil y social", constató el Papa, manifestando en este sentido su satisfacción por "la reciente aprobación de la ley sobre la cuestión de los llamados ‘borrados’. Se trata de un paso decisivo para resolver los casos de aquellos que han perdido su derecho a la residencia, al empleo y la atención sanitaria. Animo a proseguir en esta dirección y espero que se trabaje para aliviar sus sufrimientos".
Refiriéndose a las palabras de la embajadora acerca "del compromiso por el bien del ser humano, que acomuna las acciones de la Sede Apostólica y la República de Eslovenia", el Papa subrayó que "la Santa Sede alienta las iniciativas adoptadas en los foros internacionales para promover la paz y la justicia, superar las diferencias e intensificar las relaciones constructivas".