BUENOS AIRES,
El Obispo de Puerto Iguazú (Argentina), Mons. Marcelo Raúl Martorell, celebró una Misa por el 5° Congreso Internacional del Movimiento Hijos de Hogares Nuevos, donde aseguró que así como ayer, Cristo sigue necesitando mensajeros de su Palabra.
"Hay que volver a los tiempos apostólicos con la generosidad y las fuerzas que encierra en su vitalidad nueva el corazón del joven; con esa fuerza, alegría y esa disposición que no sabe de cansancios", expresó el Prelado, que destacó la presencia de los jóvenes y su deseo de encontrarse con Cristo a pesar que el mundo les ofrece "miles de atractivos" interesantes.
Mons. Martorell recordó a los jóvenes, venidos de Argentina y otros países, que la clave de la relación con el Señor es el amor. Sin embargo, advirtió que "vivimos un mundo que se ateíza cada vez más" y que desprecia los ejemplos de amor y santidad.
"Un mundo en donde los ejemplos no son siempre los mejores y en esto incluyo también a nuestra familia ‘la Iglesia’. ¿Hemos caído? ¡Lloremos nuestros pecados y pidamos perdón! Más no nos quedaremos caídos. ¡Nos pondremos de pie!", afirmó.
El Obispo dijo a los jóvenes que Jesús "nos convoca a amar la verdad y sentir pasión por la verdad y con la pasión de los Apóstoles hacerla conocer nuevamente al mundo. Esta es, queridos jóvenes, la exigencia de la fe cristiana que nos llama a anunciar al mundo la Verdad".
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