NUEVA YORK,
El Observador Permanente de la Santa Sede ante la ONU, Mons. Francis Chullikatt, expresó su esperanza de que este organismo cumpla con sus responsabilidades para hacer frente a la pobreza extrema y promueva la redirección de los recursos mundial a favor del desarrolllo de las comunidades.
En su discurso ante la Asamblea General de la ONU que trató el "Informe del Secretario General sobre la labor de la Organización", Mons. Chullikatt señaló que los gastos militares mundiales han aumentado en 15 por ciento desde el año 2007 hasta el año 2009 a pesar de la crisis económica global.
Según el Observador, las cifras son más preocupantes a la luz de que más de 1,4 millones de personas en todo el mundo viven con menos de 1.25 dólares por día.
Mons. Chullikatt explicó que la promoción de un auténtico desarrollo humano y económico requiere de un compromiso con los derechos humanos fundamentales y auténticos, entre los cuales están el derecho fundamental a la vida de los no nacidos y los derechos de las familias a criar a sus hijos.
El Prelado hizo una crítica a "los conceptos de salud reproductiva y los derechos sexuales que incluyen el acceso al aborto u otras formas de destrucción de la vida".
Asimismo, destacó la necesidad de respetar el derecho individual a la profesión de la fe en público y pidió reexaminar conceptos como la difamación de las religiones para "garantizar que la intolerancia religiosa y la incitación al la violencia con razón condenada no obstaculice el derecho a la libertad religiosa genuina que es beneficiosa para todos".