MADRID,
Las Cruzadas de Santa María invitaron a sus miembros a llevar adelante la nueva evangelización "mirando siempre a María", e imitando al Siervo de Dios P. Tomás Morales, quien enseñó que el pesimismo no es una actitud cristiana y que Dios debe ser propuesto en todos los ámbitos de la vida diaria.
Al recordarse el 1 de octubre un nuevo año del fallecimiento de su fundador, el P. Tomás Morales, las Cruzadas de Santa María emitió un mensaje en el que recordó a sus miembros que las enseñanzas del Siervo de Dios son "una orientación certera y realista para el apostolado laical en la Iglesia de todos los tiempos".
Asimismo recordaron que para recordar este aniversario, el Arzobispo de Madrid, Cardenal Antonio María Rouco Varela, presidirá una Eucaristía en la Iglesia de San Francisco de Borja el jueves 30 de septiembre a las 8:00 pm.
"En tiempos recios, fríos, de tinieblas y tempestades para manifestar y proponer la fe que profesamos, es más cómodo ceder a un pesimismo que se nutre de incredulidad y desconfianza; nos paralizan para la acción apostólica. Podríamos denominarlo ‘prudencias cómodas’, respetos humanos. Sin embargo, el P. Morales propone desechar esta actitud, sencillamente porque no es evangélica", indica el mensaje.
El Siervo de Dios, añadió, enseñó que en la evangelización lo decisivo es la audacia fundamentada en la humildad y "en la confianza sin límites en la omnipotencia de Dios". "Proponer a Dios en los vastos desiertos de nuestra civilización occidental sigue siendo la misión permanente de un bautizado", expresó las Cruzadas de Santa María.
Añadió que "enseñar a pensar, a querer y a amar son tareas básicas que se proponen hoy al educador con nuevos retos. Enseñar a pensar en una cultura hedonista y consumista, a querer con la voluntad en una sociedad del bienestar que se rige por el mínimo esfuerzo, a amar desde nuestra dignidad de personas en un mundo saturado de sexo".