MÉXICO D.F.,
Ante las inundaciones producidas en diferentes regiones del país por el paso del huracán Karl, el Arzobispo de Antequera-Oaxaca, Mons. José Luis Chávez Botello, pidió a toda la población hacer concreta la solidaridad y pidió a los damnificados no caer en la desesperación.
En un artículo publicado en el sitio web de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), el Arzobispo expresó la importancia de no caer "en la incertidumbre, la impotencia y la desesperación, mucho menos permitamos que la mezquindad y la ambición se alimente y crezca en algunos por la rapiña o por el lucro ante necesidades apremiantes, más bien abramos el corazón a la solidaridad que siempre manifiesta la grandeza del corazón humano en estas situaciones".
Mons. Chávez Botello señaló que si bien las primeras tareas de emergencia son realizadas por las propias familias afectadas "hay tareas que rebasan las posibilidades de las comunidades y son de la competencia de las autoridades; es su responsabilidad grave cumplir bien sus tareas, no improvisar o dejar a las comunidades y familias todo el peso de las secuelas de los desastres naturales".
El Prelado sostuvo que es necesario desarrollar una cultura de la prevención porque "muchas desgracias humanas, pérdidas materiales, enfermedades y trastornos sociales se pueden evitar si se elabora un plan de contingencias bien sustentado, asumido, querido y apoyado tanto por los tres niveles de gobierno como por los diferentes sectores de la sociedad".
El Arzobispo recordó que la Iglesia "siempre ha estado y estará dispuesta a apoyar de manera subsidiaria y desde su misión en estas emergencias" y pidió a los sacerdotes y fieles de las parroquias "expresar nuestra solidaridad efectiva principalmente con los damnificados más cercanos".
"Facilitemos y apoyemos todos la labor de las autoridades correspondientes en estas emergencias. Abramos también nuestro corazón a los hermanos de Veracruz haciendo llegar la ayuda a través de instituciones confiables", concluyó.