BUENOS AIRES,
El Arzobispo de La Plata, Mons. Héctor Aguer, afirmó que la Doctrina Social de la Iglesia es el mejor antídoto contra la ideologización de los jóvenes, que tanto daño y dolor ha causado en Argentina. También pidió laicos formados decididos a participar en la vida pública.
Durante la inauguración del 1° Congreso de Doctrina Social de la Iglesia, organizado por la Pastoral Social arquidiocesana, el Prelado recordó que es tarea de la Iglesia "servir a la formación de las conciencias, para que cada generación reemprenda la tarea fundamental de edificar un orden social justo".
En ese sentido, indicó que es deber de los laicos participar en la construcción de un país más justo, a través de los diversos ámbitos profesionales, económicos y políticos. "Es, por desgracia, en este campo donde se echa de menos la presencia de católicos cabales, bien formados en la fe y en la cosmovisión cristiana", expresó.
Mons. Aguer señaló que "es precisamente allí, en el mundo turbulento y a menudo sospechoso de la política, donde tendrían que expresar con su aporte la piedad para con esta patria nuestra sometida a un proceso de decadencia que por momentos pareciera irreparable".
En ese sentido, destacó la importancia de la Doctrina Social de la Iglesia. "El objetivo de esa enseñanza es contribuir a la purificación de la razón y aportar su propia ayuda para que lo que es justo, aquí y ahora, pueda ser reconocido y después puesto también en práctica", explicó.
Benedicto XVI, recordó, sitúa la doctrina social católica "en el punto en que se encuentran la fe y la política, que tiene por tarea principal el orden justo de la sociedad y del Estado".