SANTIAGO,
Esteban Rojas es uno de los 33 mineros atrapados desde inicios de agosto en una mina en Atacama. En uno de los mensajes escritos que envió a su familia, prometió que finalmente se "casará por la Iglesia" con su compañera de toda la vida.
Según informó el diario español La Razón, en la familia de Rojas suenan campanas de boda. "Jessica Yáñez le había escrito a su marido Esteban, con quien se casó hace 25 años por lo civil, que esperaba que cuando lo rescataran ‘por fin nos casemos por la Iglesia’".
Rojas respondió: "Hola Jessica, muchas gracias por preocuparte y pedirle a Dios que estemos bien. Saludos a mis hijos, a mis nietos y a mis yernos y a mis papás (…) Los quiero mucho y sigan rezando para salir luego de este lugar. Y cuando salga, compramos el vestido de novia y nos casamos por la Iglesia. Se despide Esteban Rojas".
Jessica está feliz y mientras limpia la figura de la Virgen de Guadalupe que un sacerdote instaló en las carpas donde reparten la comida, cuenta que siempre le daba "la bendición" a su esposo cuando salía de casa para ir a trabajar a la minar. "Le decía: santíguate. Él siempre tuvo el sueño de salir de aquí", asegura.
Jessica confía en que la promesa se cumpla y hasta se animó a enviar un mensaje a sus amigos y familiares: "ya saben, necesito cocina, refrigerador. Les voy a pasar la lista de novios".
Según La Razón, los trabajadores atrapados han perdido 10 kilos por la presión y los 36 grados de temperatura que soportan en la profundidad. Cada día, después de alimentarse y planificar la jornada, los mineros se sientan a revisar los mensajes y provisiones que les envían diariamente.