LA HABANA,
El Arzobispado de La Habana respondió a través de una nota de prensa, firmada por su vocero Orlando Márquez Hidalgo, a una carta abierta dirigida al Papa Benedicto XVI hace unos días y que está firmada por un grupo de disidentes cubanos.
La nota de prensa con fecha 20 de agosto del Arzobispado de La Habana señala que este texto aparece "en respuesta al reclamo de comentarios de varios medios de comunicación, y debido a la indignación generada en un número de fieles católicos que han conocido en las últimas horas de una carta abierta dirigida al Santo Padre Benedicto XVI, de contenido ofensivo para con la Iglesia en Cuba".
La carta de los disidentes
La carta abierta de los disidentes está firmada por 165 personas, hombres y mujeres, muchos de los cuales son católicos y han participado en el Proyecto Varela. Muchos son además familiares de las Damas de Blanco: un grupo de mujeres que establecieron la protesta pacífica más larga en la historia del actual régimen que, afirman, "aspira desesperadamente" a su desaparición.
En esta misiva los disidentes dicen no estar de acuerdo con "la postura que ha tenido la jerarquía eclesiástica cubana en su intervención por los presos políticos" que consideran "lamentable y de hecho bochornosa". Los firmantes consideran que si los obispos hubieran tenido una "correcta mediación" habrían oído "los reclamos de ambas partes" y los habrían conciliado.
"Sin embargo –dicen– la solución del destierro, aceptada por los que han estado siete años injustamente presos solamente por sus ideas solo beneficia a la dictadura" pues este "éxodo" les impediría seguir en la lucha por la democracia, en Cuba. La carta concluye con un pedido para que "cese el apoyo político de los que representan a Dios ante los católicos cubanos" al régimen.