ROMA,
El Secretario del Consejo Pontificio para la Justicia y la Paz, Mons. Mario Toso, denunció ante la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) que los cristianos se han convertido en el grupo religioso más perseguido en el mundo.
Mons. Toso presidió la delegación de la Santa Sede que hace unos días participó en la Conferencia sobre la tolerancia y la no discriminación, organizada por la OSCE, una organización conformada por 56 Estados participantes, de Europa, Asia Central y América del Norte (Canadá y Estados Unidos). En el encuentro se prestó particular atención a la discriminación contra los cristianos y miembros de otras religiones.
"Con el crecimiento de la intolerancia religiosa en el mundo, está ampliamente documentado que los cristianos son el grupo religioso más discriminado", alertó.
"Más de 200 millones de ellos, pertenecientes a confesiones diferentes, se hallan en situaciones de dificultad a causa de instituciones y contextos legales y culturales que los discriminan", añadió.
Ante todo dejó claro que los cristianos no sólo son discriminados donde son minoría, sino que además se comprobó que en ocasiones sus derechos fundamentales son cercenados incluso cuando son mayoría.
Incluso en la OSCE, afirmó Mons. Toso, en algunos países se dan todavía "leyes intolerantes y discriminantes" contra creyentes. "Se dan episodios repetidos de violencia incluso asesinatos de cristianos".