BUENOS AIRES,
El Arzobispo de San Juan de Cuyo, Mons. Alfonso Delgado, afirmó que "el empeño por la dignidad de la persona, de la familia y de los niños más vulnerables no termina con esta votación del Senado", sino que ahora el pueblo ha empezado a darse cuenta qué autoridades están a favor y en contra de sus convicciones.
Con respecto a la ley de matrimonios homosexuales con derecho a adopción, el Prelado señaló que carece de legitimidad social "porque desconoce la fuerte expresión del federalismo argentino y el amplio consenso social observado en el país y verificado en las Audiencias Públicas. Se trata de un daño grave al bien social".
Sin embargo, Mons. Delgado dijo que esta actitud de los gobernantes de beneficiar a una minoría en detrimento de la mayoría no es nueva en el país.
Los legisladores, indicó, "tampoco se han detenido a pensar en las personas más vulnerables –los niños huérfanos–, que así se convierten en ‘objeto’ de afecto en vez de ser ‘sujeto’ de amor y calidez de una familia con padre y madre. Esto es duro decirlo, pero esta ley se ha ‘perpetrado’ en un país donde las leyes priorizan los derechos de los niños por encima de cualquier otro derecho, por más legítimo que sea".
Mons. Delgado señaló que mientras esto ocurre, "otros graves problemas de la mayoría silenciosa siguen sin resolverse: la pobreza y la exclusión, una educación para todos, la seguridad, la transparencia y tantas cosas más".
El Prelado felicitó a los ciudadanos que expresaron sus convicciones "sin discriminar ni ofender a nadie", así como a los legisladores y gobernantes que representaron "a la inmensa mayoría del pueblo argentino. El pueblo sabrá reconocerlo y recordarlo".