ROMA,
A seis meses del terremoto que sacudió Haití el 12 de enero de 2010, el Nuncio Apostólico en el país, Mons. Bernardito Auza, señaló que todavía "muchos pobres no ven un camino de salida"; por lo que pidió a la comunidad internacional ver que "tenemos aún necesidad de ayuda".
"¡Pareciera que el terremoto fue ayer! No hay nadie que se lleve los escombros, no se puede transitar por ciertas avenidas de la capital. No hay locales para algunas instituciones del mismo gobierno", indicó el Prelado en entrevista a la agencia vaticana Fides.
Mons. Auza señaló que "el problema de la reconstrucción está ligado a la composición de la Comisión formada para esta misión", ya que el gobierno aún no aprueba la cantidad precisa de miembros extranjeros y haitianos que la constituirán.
"Nosotros como Iglesia estamos esperando una señal de parte del gobierno para poder actuar con todas nuestras fuerzas. Por ejemplo, algunas instituciones religiosas no pueden comenzar a reconstruir los edificios y las casas porque falta un certificado de seguridad otorgado por el gobierno para aquella zona. Y esto no depende de nosotros", añadió.
"He tenido un coloquio con el Presidente René Preval -continuó-, y él me ha dicho que en este momento considera que son 3 las prioridades políticas para el país: primero, instituir un organismo para la reconstrucción; segundo, establecer las posibles fechas para las elecciones en el país, muy probablemente para fines de noviembre; tercero, coordinar la reubicación de tantos desplazados que aún viven en tiendas".
Mons. Auza señaló que el proyecto prioritario es la reconstrucción de las iglesias y de "dos seminarios mayores nacionales para el país. Para este proyecto hemos sido animados por las Conferencias Episcopales de los países amigos quienes han contribuido en modo consistente, y esto ha ayudado a levantar los ánimos de todos los que trabajamos en la reconstrucción de la Iglesia en Haití".