SEVILLA,
Luis C.O., el hombre de 37 años de edad que fue detenido en la noche del domingo tras abalanzarse sobre la imagen de Jesús del Gran Poder y arrancar uno de los brazos de la talla al término de la Misa en San Lorenzo, está imputado por un delito de atentado contra el patrimonio histórico-artístico, por lo que podría ser castigado con una pena de hasta tres años de prisión.
El artículo 323 del Código Penal indica que "será castigado con la pena de prisión de uno a tres años y multa de 12 a 24 meses el que cause daños en un archivo, registro, museo, biblioteca, centro docente, gabinete científico, institución análoga o bienes de valor histórico, artístico, científico, cultural o monumental, así como en yacimientos arqueológicos".
Por el momento, el detenido sigue en dependencias policiales en espera de pasar a disposición judicial, algo que podría ocurrir en las próximas horas, informaron a Europa Press fuentes de la investigación. Por su parte, y según indicó el delegado del Gobierno en Andalucía, Juan José López Garzón, la Policía Nacional se encuentra analizando el contenido de un macuto incautado el domingo a este hombre para "sacar las consecuencias que procedan".
Aparte de los daños causados en uno de sus brazos, el individuo rasgó la túnica y propinó varios golpes en el pecho de la talla que reproduce al Jesús del Gran Poder, una de las imágenes más veneradas de Sevilla. Poco después fue reducido por un agente de la Policía que se encontraba libre de servicio en la basílica.
El detenido aprovechó el besapiés del Gran Poder al término de la Misa para abalanzarse sobre la imagen, generando un revuelo entre el resto de personas que esperaban su turno. El agente de paisano que lo redujo resultó herido a consecuencia de la resistencia del detenido.