VATICANO,
El diario vaticano L’Osservatore Romano publica hoy un artículo en el que explica que con las llamadas "células sintéticas" que han sido creadas en un laboratorio de Estados Unidos no se ha generado vida. Ante estas investigaciones, dijo a su turno el Director de la Sala de Prensa de la Santa Sede, P. Federico Lombardi, hay que actuar con cautela y "esperar a tener mayor información".
En el artículo titulado "un motor óptimo pero no es vida", el médico italiano Carlo Bellieni señala que el trabajo de Craig Venter que generó un genoma "sintético" es "un trabajo de ingeniería genética de alto nivel, un paso a la sustitución de parte del ADN. Pero en realidad no se ha creado vida, sino que se ha suplantando uno de sus motores".
El galeno cita luego al genetista David Baltimore del California Institute of Technology quien escribe en el New York Times: "no han creado vida, sólo la han copiado" y añade luego el bioingeniero Jim Collins: "esto no representa la creación de vida desde cero".
Seguidamente señala que este descubrimiento es algo que debe considerarse por sus posibles aplicaciones, pero advierte que es necesario "unir al coraje la cautela: las acciones sobre el genoma pueden –se espera– curar, pero van a tocar un terreno fragilísimo en el que el ambiente y la manipulación juegan un rol que no debe minusvalorarse".
"El ADN –explicó Bellieni– no es el motor del que se sustituye el pistón, sino una parte de un ser viviente sobre el que estímulos inoportunos, incluso hechos con buena intención, pueden ‘apagar’ los genes de manera inesperada, según las reglas de la epigenética (estudio de las interacciones entre genes y ambiente que se producen en los organismos). Muchos están de hecho preocupados por los posibles desarrollos futuros de organismos genéticamente modificados".
Tras recordar que "se puede reconstruir el ADN y eso no asombra, es necesario recordar que éste no es más que uno de los ‘motores’ de la vida", el Dr. Bellieni concluye precisando que el peso del ADN "es grande y grandes son las expectativas de la ciencia genética. Sin embargo, el ADN siendo un ‘óptimo motor’, no es la vida".