BRASILIA,
Una fuente pro-vida en Brasil dio a conocer que actualmente en la Cámara de Diputados se trata un proyecto de ley conocido como el "Estatuto del Nascituro" que debió haberse votado hace unos días y que podría votarse este miércoles para garantizar explícitamente el derecho a la vida de todo no nacido desde la concepción. Denuncia una serie de presiones, incluso del gobierno, para que esta importante iniciativa no sea aprobada pues, como afirma el diputado abortista Ivan Valente, ésta busca "combatir cualquier posibilidad de lucha por la legalización del aborto hoy en el país".
El analista Alberto Monteiro denunció las maniobras que grupos anti-vida han puesto en marcha para no aprobar esta iniciativa legal que está de acuerdo con la Declaración Universal de los Derechos Humanos, la Convención sobre los Derechos del Niño de la ONU, el Pacto de San José de Costa Rica de 1969, de los cuales Brasil es firmante y que garantizan el derecho a la vida del no nacido desde la concepción.
El Estatuto del Nascituro fue presentado en 2007 por los diputados federales Luiz Bassuma y Miguel Martini, que busca explicitar en el sistema legar brasileño los compromisos adquiridos por los mencionados tratados internacionales.
La sola presentación, además de su explícita defensa de la vida, les valió a ambos legisladores del Partido de los Trabajadores al que pertenecen, "una sanción" por "antidemocráticos" y por ir en contra de los intereses anti-vida del Presidente Lula da Silva expresados en el "Plan de Derechos Humanos" que promueve el aborto y la agenda homosexual y al que los obispos se han opuesto enérgicamente a principios de año.
El Estatuto señala: "son reconocidos todos los derechos del Nascituro desde la concepción, en especial el derecho a la viuda, la salud y a todos los demás derechos de personalidad previstos en los artículos 11 a 21 del Código Civil Brasileño, prohibiéndose al Estado o a particulares causar daño al nascituro en razón de acto cometido por cualquiera de sus progenitores", con lo que se le protegería de morir en un aborto.
La mayoría de los diputados de la Comisión de Seguridad Social y Familia, donde el proyecto está siendo debatido, está a favor del mismo. Sin embargo las presiones nacionales e internacionales no han dejado de verse y los medios de comunicación seculares callan. Monteiro explica que esto se debe a que "un reportaje negativo haría conocer el proyecto y aumentaría las probabilidades de su aprobación".