BUENOS AIRES,
El presidente de Cáritas Argentina, Mons. Fernando María Bargalló, Obispo de Merlo-Moreno, consideró que la celebración del Bicentenario patrio 2010-2016 es "un tiempo para dar gracias a Dios por el camino recorrido y para desafiarnos a construir juntos una Argentina donde a nadie le falte lo necesario para vivir dignamente".
Tras señalar el deseo de alcanzar "una convivencia social pacífica, donde se priorice el bien común, desde las claves del entendimiento, el consenso y la reconciliación", el Prelado afirmó que también "nos duele y desalienta el clima de desconcierto y confrontación del que no logramos salir y que no hace más que ensanchar y profundizar las heridas que, como sociedad, aún no pudimos cerrar".
"Una de estas heridas es, sin duda, la realidad de exclusión que aún persiste. Estar excluido es mucho más que carecer de lo básico. Es quedar afuera de un sistema social, de un espacio político, cultural, económico. Es estar al margen de las decisiones, de la participación, de las relaciones sociales, de las oportunidades de crecimiento", indicó.
El Prelado advirtió los "distintos y variados factores que ocasionan la exclusión" entre los que señaló el individualismo que "debilita y rompe el tejido social, porque lleva a que cada uno se concentre y encierre en sí mismo".
"Quien cree que puede realizarse sin contar con los demás, daña su esencia más profunda pues el ser humano es comunión, es intercambio; se construye desde el compartir con los otros y nadie puede ser plenamente feliz si se ocupa sólo de su propia vida", agregó.
Por ello, el presidente de Cáritas Argentina exhortó a los fieles e integrantes de la organización caritativa de la Iglesia a "procurar permanentemente convertir nuestros pequeños actos cotidianos en signos concretos y visibles del amor de Dios que se preocupa especialmente por sus hijos más pequeños y desprotegidos".