MÉXICO D.F.,
La última nota editorial del Sistema Informativo de la Arquidiócesis de México (SIAME) titulada "Los enemigos del Papa son enemigos de la humanidad" comenta la campaña mediática en contra de Benedicto XVI y explica que el Santo Padre siempre ha hablado en defensa de los derechos fundamentales del hombre: la vida, la dignidad y la libertad.
El texto del 18 de abril señala que su título "no es exagerado, pues quienes critican a la ligera al Sumo Pontífice o elaboran enredadas hipótesis aparentemente racionales para denunciar el ‘anacronismo’, ‘intolerancia’ y ‘arrogancia’ del Santo Padre, verdaderamente atentan contra la humanidad, contra el desarrollo de la civilización que participa en la construcción de instituciones que salvaguardan los derechos más fundamentales del hombre: a la vida, a la dignidad y a la libertad".
Seguidamente el editorial detalla algunos aspectos de la gran labor del entonces Cardenal Joseph Ratzinger al frente de la Congregación para la Doctrina de la Fe, cuando "advirtió sobre la responsabilidad del pensamiento cristiano en torno al ejercicio de la sexualidad; aclaró los riesgos de cierta teología de la liberación que se erigía como la única opción para resolver los problemas sociales; denunció el peligro de la espiritualidad oriental intimista, ajena a la realidad, etc. Subestimada por muchos, esta denuncia lamentablemente implicó también la antipatía de algunos dentro de la Iglesia".
Con su elección a la Sede de Pedro, "la responsabilidad de Benedicto XVI como máximo pontífice, más allá de los muros de la Iglesia, es con el destino de la humanidad".
Ante un mundo que promueve la indiferencia ante el sufrimiento, una cultura individualista, consumista y hedonista que vive inmerso en el "ejercicio sexual irracional", dice el editorial, "la Iglesia Católica –dirigida y liderada por el valiente testimonio y pensamiento del Santo Padre– no cesa en alertar al hombre actual de las consecuencias negativas de abandonar los valores universales y cristianos que protegen la vida humana, la familia y la correcta convivencia social".
El Papa Benedicto XVI, afirma el texto, "ha desenmascarado las perversas intenciones de absurdos ‘gobiernos progresistas’ que pretenden destruir la vida desde el seno de la madre y buscan confundir a la gente, enarbolando uniones antinatura, disfrazándolas de ‘familias’ y ‘matrimonios’".