VATICANO,
El Director de la Sala de Prensa de la Santa Sede, P. Federico Lombardi, escribió un texto titulado "Después de Semana Santa, mantener el rumbo", dado a conocer hoy a través de la web de Radio Vaticano. En él explica que el Papa Benedicto XVI es el guía coherente en el camino de rigor y de verdad ante los abusos cometidos por algunos miembros del clero, que no son tantos como dice la prensa, sino una excepción que involucra a muy pocos de ellos.
En el artículo el P. Lombardi señala que ante este delicado tema "en primer lugar hay que seguir buscando la verdad y la paz para los ofendidos. Entre las cosas que más llaman la atención es que hoy salen a la luz tantas heridas internas que también se remontan a hace muchos años –incluso a diversas décadas– pero que, evidentemente, siguen abiertas".
"Muchas víctimas no buscan un resarcimiento económico sino una ayuda interior, un juicio acerca de su dolorosa vivencia personal. Todavía queda algo por entender realmente. Probablemente debemos tener una experiencia más profunda de los hechos que han marcado tan negativamente la vida de las personas, de la Iglesia y de la sociedad. Un ejemplo, en ámbito colectivo, son el odio y la violencia de los conflictos entre los pueblos, que resultan tan difíciles de superar para una reconciliación verdadera. Los abusos hieren a nivel personal profundo".
Por eso, prosigue el sacerdote jesuita, "han hecho muy bien los episcopados que valerosamente han reemprendido el establecimiento de modos y lugares para que las víctimas puedan expresarse libremente y ser escuchadas, sin dar por descontado que el problema estuviera ya afrontado y superado gracias a los centros de escucha instituidos hace tiempo, al igual que aquellos episcopados u obispos que con trato paternal prestan atención espiritual, litúrgica y humana a las víctimas".
"Parece cierto que el número de las nuevas denuncias de abusos disminuye, como está sucediendo en Estados Unidos, pero para muchos el camino del saneamiento en profundidad empieza solamente ahora y para otros todavía está por empezar. En el contexto de atención a las víctimas, el Papa ha escrito que está dispuesto a nuevos encuentros con ellas, involucrándose en el camino de toda la comunidad eclesial. Pero se trata de un camino que para tener efectos profundos debe llevarse a cabo, todavía más, en el respeto de las personas, y en búsqueda de la paz".
Al referirse luego a los procesos contra los que han cometido estos crímenes, el P. Lombardi explica que es necesario seguir "aplicando con decisión y veracidad los procedimientos adecuados del juicio canónico de los culpables y de colaboración con las autoridades civiles en lo que se refiere a sus competencias judiciales y penales, teniendo en cuenta la especificidad de las normativas y de las situaciones en los diversos países".