VATICANO,
Saliendo al paso de las acusaciones del New York Times, el diario vaticano L’Osservatore Romano (LOR) resalta la "transparencia, firmeza y severidad en el dar luces sobre diversos casos de abusos sexuales cometidos por sacerdotes y religiosos" como los "criterios que el Papa Benedicto XVI está indicando a toda la Iglesia con constancia y serenidad"; precisando que no existe "ningún tipo de encubrimiento" del Santo Padre sobre estos casos.
LOR explica que este modo de obrar del Santo Padre es coherente "con su historia personal y con su actividad de más de 20 años como Prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe" que "evidentemente es temido por quien no quiere que se afirme la verdad y por quienes preferirían poder instrumentalizar, sin ningún fundamento en los hechos, episodios horribles y acciones dolorosas que se conocen de hace decenas de años".
Esto lo demuestra, prosigue, "el artículo publicado hoy por el diario estadounidense The New York Times junto a un comentario, sobre el grave caso del sacerdote Lawrence C. Murphy, responsable de abusos contra niños sordos en un instituto católicos, donde trabajó entre 1950 y 1974".
Según el artículo del New York Times, "las acusaciones relativas a las conducta del sacerdote fueron enviadas en julio de 1996 por el entonces Arzobispo de Milwaukee, a la Congregación para la Doctrina de la Fe –de la que eran Prefecto el Cardenal Joseph Ratzinger y secretario el Arzobispo Tarcisio Bertone– para obtener indicaciones acerca del correcto procedimiento canónico a seguir".
"La solicitud –explica LOR– no se refería a las acusaciones sobre los abusos sexuales, sino a la de la violación del sacramento de la penitencia, perpetrada a través de la incitación en el confesionario, cuando un sacerdote solicita al penitente cometer un pecado contra el sexto mandamiento"
Es importante observar, dice luego el diario vaticano como ya ha declarado el Director de la Sala de Prensa de la Santa Sede, que "la cuestión canónica presentada a la Congregación no estaba en ningún modo relacionada a un potencial proceso civil o penal en relación al Padre Murphy, contra el que ya la arquidiócesis había abierto un proceso canónico, como resulta evidente de la abundante documentación publicada en línea por el diario de Nueva York".