BUENOS AIRES,
Los directores de la ONG "Para Hacerse Oír-Hablemos Claro" (PHHC) emitieron un comunicado en el que solicitan al gobernador de Mendoza (Argentina), Celso Jaque, se oponga "a la pretensión de la asociación ‘20 de Setiembre’" que busca retirar de los espacios públicos "los crucifijos y otros símbolos religiosos".
Esta iniciativa, explican, aparece "en el marco de una campaña en distintas partes del país, que de tener éxito, vaciará a nuestra sociedad de sus valores religiosos, de su cultura y de su tradición, que hacen la identidad nacional".
Los directores de PHHC Martín J. Viano y la Lic. Araceli Ramilo Alvarez de Viano señalaron que la asociación 20 de Setiembre envió una solicitud a las autoridades de Mendoza para que "sean retirados de los espacios públicos los crucifijos y otros símbolos religiosos, cuya presencia califica de ‘invasión’, aduciendo para ello el principio de ‘neutralidad’ del Estado y la necesidad de ‘vivir una democracia de mayor intensidad, pluralidad y respeto mutuo’".
"Es indispensable dejar claro –señalan– que existe fundamento en nuestro ordenamiento jurídico para exponer símbolos religiosos en los edificios públicos. En virtud del art. 31 de la Constitución Nacional, ésta es ley suprema de la provincia de Mendoza. Nuestra Constitución plasmó contenidos que estaban afincados a la comunidad social que la preexistía, y que los legitimó a título de la continuidad y permanencia que acusaban en la estructura social".
Asimismo, añadieron, "el art. 2 la Constitución dispone que el gobierno sostiene el culto católico, apostólico romano" y explicaron que "‘sostener’ significa en este contexto: a) La unión moral del Estado con la Iglesia y b) El reconocimiento de ésta como persona de derecho público".
"La existencia de crucifijos en edificios públicos, pues, coadyuva a la finalidad constitucional de sostener el culto católico, de conformidad al status jurídico del que goza la Iglesia", subrayaron.