GRANADA,
Los obispos de Andalucía pidieron aclarar ciertos aspectos del "anteproyecto de ley de derechos y garantías de la dignidad de la persona en el proceso de la muerte", para evitar que se favorezca una "eutanasia encubierta" en detrimento de los enfermos terminales, cuya dignidad humana se mantiene hasta el final.
"Hay que evitar toda ambigüedad", advirtieron en un comunicado, que señaló que "carece de fundamento antropológico el distinguir entre vida biológica y vida personal", porque la vida humana "es siempre una unidad biológica y personal y la atención médica ha de ser integral".
"Estas ambigüedades abren el camino a interpretaciones contrarias a la dignidad de la persona humana en el proceso de su muerte con el riesgo de favorecer una forma de eutanasia encubierta", indicó.
Los obispos señalaron que ante los casos complejos, es necesario garantizar el correcto funcionamiento de los comités de ética, pero también reconocer en los profesionales sanitarios el derecho a la objeción de conciencia.
"La limitación del ‘esfuerzo terapéutico’ tiene que dejar claro que en los enfermos en coma o en estado vegetativo los cuidados ordinarios y básicos, como la hidratación y la alimentación, hay que realizarlos siempre. Si se prescinde de ellos en lugar de permitir la muerte inevitable lo que se hace es provocarla y esto es una forma de eutanasia", advirtieron.
Los obispos andaluces indicaron que "la aplicación de esta Ley exige su adecuada financiación que garantice los derechos del enfermo a una buena medicina paliativa y evite la menor duda de que el enfermo, aunque esté muy deteriorado por la enfermedad, no ha perdido ni un ápice de su dignidad".