SAN JOSÉ,
El nuevo rector de la Universidad Católica de Costa Rica, P. Fernando Muñoz Mora, explicó que los centros de estudios como el que ahora dirige deben ser verdaderamente católicos, inspirados en las enseñanzas de la Iglesia y orientados a la búsqueda de la verdad a través de la correcta investigación.
El P. Muñoz, que también posee un doctorado en Psicología por la Universidad Iberoamericana de México, recordó en entrevista concedida al profesor Oscar Lobo Contrillo que la Universidad nació del corazón de la Iglesia, como indica el venerable Juan Pablo II en la exhortación apostólica sobre las universidades: Ex corde ecclesiae.
Seguidamente indicó que un elemento esencial lo señaló "quien fuera rector de la universidad en la que obtuve el grado en psicoterapia: ‘una universidad tiene que ser universidad y una universidad católica tiene que ser católica’ (P. Michael Scanlan). Con esto no digo que se haga algún tipo de discriminación a quienes piensen o crean de manera diferente a un católico, pero sí se debe definir de manera clara nuestra identidad de universidad, y con un camino claro definido por el Magisterio de la Iglesia".
El Rector explicó también que "dentro del quehacer de la institución el presupuesto fundamental son los estudiantes a quienes estamos destinados a formar. Hacia ellos va nuestro esfuerzo para que su ser y quehacer profesional tengan un impacto en la sociedad".
El Doctor en Psicología detalló luego la urgencia de tener alumnos que se dediquen a la investigación así como maestros que sean buenos profesionales que alienten esta importante práctica. Al hablar luego del avance tecnológico y de las herramientas que éste presta en la investigación, el P. Muñoz dijo que es necesario "irrumpir en el ámbito de los medios de comunicación, no es posible que tengamos medios de información tan manipulados" e indicó que es necesario que toda universidad católica marque "una diferencia en lo que hacemos porque lo hacemos con calidad".
Tras exhorta a no quedarse "atrás de las universidades católicas que iniciaron esta aventura de la enseñanza en el siglo XI", el sacerdote reconoció que "ha habido errores, como en todo lo que está constituido por humanos, pero en la sistematización del pensamiento la Iglesia Católica ha tenido un grandísimo aporte y lo mantendrá por medio de la Universidad".