ROMA,
El Arzobispo de Cuttack-Bhubaneswar, Mons. Raphael Cheenath, alentó a la reconciliación a través de la justicia ante la persecución anti-cristiana en el estado de Orisa en India, y manifestó su desacuerdo con el gobierno local por la falta de interés sobre estos hechos.
En repetidos ataques a cristianos, ocurridos entre agosto y diciembre de 2008, más de 54 mil personas se quedaron sin hogar. Entre asesinatos, incendios premeditados y violaciones, son casi 11 mil familias las que han quedado destrozadas y han tenido que migrar a diferentes estados del país.
El Arzobispo Cheenath reprueba tajantemente la falta de apoyo del gobierno, ya que luego de 15 meses después de la masacre, aún hay alrededor de 4 mil 400 familias viviendo en tiendas, refugios improvisados o en los restos de sus casas.
Mons. Cheenath comentó que la Iglesia, a pesar de no recibir ninguna ayuda para la reconstrucción de sus instituciones, ha sido de gran ayuda para reubicar a los necesitados; sin embargo, el trabajo va más allá de las manos de una institución no gubernamental.
Luego de los ataques a finales de 2008, el gobierno entregó arbitrariamente 50 mil rupias (1 100 dólares aprox.) a las familias que habían perdido totalmente sus casas, a pesar de que la reconstrucción de una simple casa cuesta de 85 mil rupias (1 840 aprox.).
Hasta el momento la Iglesia Católica ha ayudado en la reconstrucción de 181 casas totalmente destruidas, 546 parcialmente destruidas, y ha repartido materiales de construcción a 752 familias.