ROMA,
L’Osservatore Romano publicó un artículo en el que, a través de una serie de documentos históricos, se comprueba que la resistencia alemana antinazi pidió al Papa Pío XII no intervenir directamente contra Hitler; en una clara respuesta a los detractores del Papa Pacelli que lo acusan falsamente de haberse mantenido en "silencio" ante el holocausto, cuando, además, sí ayudó a salvar la vida de más de 800 mil judíos.
El artículo escrito por el historiador y catedrático italiano Roberto Pertici, explica que el documento 242 que hace parte de una relación dedicada al Vaticano y Estados Unidos publicada en Milán en 1978, elaborada por Ennio Di Nolfo, da a conocer el testimonio del abogado católico bávaro Josef Müller, quien hacía parte de la resistencia alemana antinazi y que fue el contacto con la Santa Sede entre 1939 y 1940.
"Müller era parte de los servicios secretos alemanes (Abwehr)" que constituía "uno de los centros ocultos de la oposición anti-hitleriana. Fue enviado a Roma con una excusa, pero con la misión de tomar contacto con el entorno del Papa (en el que habían varios obispos alemanes) y hacerle saber a Pío XII del proyecto de la oposición alemana para derrocar a Hitler y construir una Alemania democrática", explica el artículo.
Las victorias de Hitler en Noruega y en Francia hicieron abortar la operación que sin embargó no impidió generar un contacto claro.
Müller fue arrestado en 1943 para luego ser conducido a un campo de concentración. Tras su liberación, por parte del ejército estadounidense el 5 de mayo de 1945, el abogado llegó al Vaticano el 2 de junio y escuchó al Papa Pío XII condenar enérgica y públicamente el nazismo.
"Pueden ver –dijo el Pontífice en aquella ocasión– lo que queda detrás de una concesión y una actividad del Estado que no tiene en cuenta los sentimientos más sagrados de la humanidad, que pisotea los inviolables principios de la fe cristiana. El mundo entero, estupefacto, contempla hoy la ruina" generada por los nazis.