VATICANO,
Al recibir este mediodía (hora local) a los obispos de la Conferencia Episcopal de Inglaterra y Gales que han realizado su visita ad limina, el Papa Benedicto XVI resaltó que la "fidelidad al Evangelio no limita en modo alguno la libertad de los demás; por el contrario, sirve a su libertad, ofreciendo a los fieles la verdad".
En su discurso, el Santo Padre indicó que "entre las presiones del secularismo, también existen muchos signos de fe viva y de devoción entre los católicos de Inglaterra y Gales" como el "entusiasmo en acoger las reliquias de Santa Teresa, el interés por la futura beatificación del Cardenal Newman y la ilusión de los jóvenes que participarán en la Jornada Mundial de la Juventud".
"Con ocasión de mi próximo viaje apostólico a Gran Bretaña tendré la oportunidad de experimentar esa fe, y como Sucesor de Pedro, fortalecerla y confirmarla. Durante los meses de preparación, alentad a los católicos de Inglaterra y Gales en su devoción y asegurarles que el Papa les recuerda constantemente en sus oraciones y les lleva en su corazón", prosiguió Benedicto XVI.
Tras subrayar que Inglaterra "es conocido por su firme compromiso en la igualdad y oportunidad de todos los miembros de la sociedad", el Santo Padre dijo que "el efecto de alguna de las leyes cuyo fin era alcanzar este objetivo ha sido imponer limitaciones injustas a la libertad de las comunidades religiosas para actuar según sus creencias".
El Papa animó a luego a "asegurar, como pastores, que la enseñanza moral de la Iglesia se presente siempre en su integridad y se defienda con convicción. La fidelidad al Evangelio no limita en modo alguno la libertad de los demás; por el contrario, sirve a su libertad, ofreciendo a los fieles la verdad".
"Para presentar la plenitud del mensaje salvífico de Cristo al mundo con eficacia y convicción, la comunidad católica en vuestro país tiene que hablar con una única voz", destacó.