VATICANO,
Hoy se dio a conocer el mensaje del Papa Benedicto XVI con motivo de la 44° Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales que se celebra el 16 de mayo, en el que el Santo Padre pide a los sacerdotes anunciar a Cristo también en el mundo digital.
En el texto titulado "El sacerdote y la pastoral en el mundo digital: los nuevos medios al servicio de la Palabra", el Pontífice señala que este tema se "inserta muy apropiadamente en el camino del Año Sacerdotal, y pone en primer plano la reflexión sobre un ámbito pastoral vasto y delicado como es el de la comunicación y el mundo digital, ofreciendo al sacerdote nuevas posibilidades de realizar su particular servicio a la Palabra y de la Palabra".
Seguidamente explica que la cada vez mayor importancia de los nuevos medios de comunicación y su incorporación en la vida cotidiana hace que sea "cada vez más importante y útil su uso en el ministerio sacerdotal".
Tras resaltar que "la tarea primaria del sacerdote es la de anunciar a Cristo, la Palabra de Dios hecha carne, y comunicar la multiforme gracia divina que nos salva mediante los Sacramentos", el Papa indica que "el mundo digital, ofreciendo medios que permiten una capacidad de expresión casi ilimitada, abre importantes perspectivas y actualiza la exhortación paulina: ‘¡Ay de mí si no anuncio el Evangelio!’"
Ante las nuevas experiencias de comunicación, dice el Papa, los sacerdotes "deben anunciar el Evangelio valiéndose no sólo de los medios tradicionales, sino también de los que aporta la nueva generación de medios audiovisuales (foto, vídeo, animaciones, blogs, sitios web), ocasiones inéditas de diálogo e instrumentos útiles para la evangelización y la catequesis".
"El sacerdote podrá dar a conocer la vida de la Iglesia mediante estos modernos medios de comunicación, y ayudar a las personas de hoy a descubrir el rostro de Cristo. Para ello, ha de unir el uso oportuno y competente de tales medios –adquirido también en el período de formación– con una sólida preparación teológica y una honda espiritualidad sacerdotal, alimentada por su constante diálogo con el Señor".