BUENOS AIRES,
Una multitud de fieles se congregó este sábado en la puerta de la Gruta de Lourdes para caminar hasta la catedral de los Santos Pedro y Cecilia, junto a la imagen de la Virgen de Luján, en la 36° edición de la tradicional Marcha de la Esperanza que se realizó en Mar de Plata, Argentina.
Los miles de participantes, que llegaron a colmar 12 cuadras, marcharon bajo el lema "Madre, a tu corazón confiamos la causa por la vida" y fueron acompañados del Obispo de Mar de Plata, Mons. Juan Alberto Puiggari, quien presidió una Eucaristía al finalizar el concurrido evento.
Tras esta intensa marcha, el Prelado presidió una Misa con la que se inauguró el Año Diocesano de la Familia. En su homilía señaló: "es difícil agregar palabras a todo lo que hemos escuchado, orado, cantado, a todo lo que seguramente está en el corazón de cada uno de ustedes, por eso llenos de gratitud y alegría estamos culminando con esta Eucaristía. Esta Marcha, como todos los años ha sido una manifestación del amor de ustedes a nuestra Madre Santísima".
"Ante tantos signos de muerte, tantas victimas inocentes, tanto dolor, tanta violencia e injusticia no hemos reaccionado por el derrotismo o por el no te metás, por el contrario hemos querido comprometernos y por eso estamos acá, para ser discípulos de Aquel que es la vida y misioneros de esa vida plena que nos vino por María, con la seguridad de que le estamos ofreciendo a este mundo la salvación y la felicidad que tanto ansía" expresó.
Al finalizar la Eucaristía se dio inicio al Año Diocesano de la Familia se repartieron unos pesebres que luego fueron bendecidos por Mons. Puiggari, quien recordó las palabras del Papa Benedicto XVI en Aparecida: "la familia, patrimonio de la humanidad, constituye uno de los tesoros más importantes de los pueblos latinoamericanos, es y ha sido escuela de fe, palestra de valores humanos y cívicos, hogar en que la vida humana nace y se acoge generosa y responsablemente".
El Prelado alentó a los fieles a trabajar en la familia "como salió del corazón de Dios, no como pretenden imponernos algunos hombres o la cultura de hoy".