LIMA,
El vicepresidente del Tribunal Constitucional (TC), Carlos Mesía, defendió el fallo de este organismo que prohíbe la distribución de la píldora del día siguiente en los establecimientos de salud pública porque no se ha descartado su potencial efecto abortivo y aclaró que la sentencia no discrimina a la gente pobre.
En declaraciones a Radio Programas del Perú, el magistrado salió al frente de las críticas de los partidarios de la píldora que acusan al TC de haber “discriminado” a la población de menos recursos porque la sentencia no dice nada sobre la venta del fármaco y se limita a prohibir el reparto gratuito del mismo.
Sin embargo, Mesía aclaró que el TC falló sobre un recurso de amparo presentado por una ONG para frenar la distribución y que no menciona la venta. En ese sentido, explicó que la sentencia no podía ir más allá de lo solicitado pero deja en claro que el efecto abortivo no ha sido descartado por las comunidad científica.
“Mientras la píldora siga siendo una perplejidad científica, me parece que los jueces no podemos arrogar la atribución de médicos o de embriólogos. Ya que los jueces no somos médicos, ante la duda hemos ido por el más débil", explicó Mesía.
Asimismo, precisó que "cualquiera que haya sido el sentido del fallo del Tribunal Constitucional, la sentencia no hubiera dejado de tener un gran margen de opinabilidad, en la medida que la ciudadanía está partida en dos sobre este tema".
Mesía también descartó que el TC haya recibido presiones para fallar contra la píldora. “Presiones no han habido ni de la Iglesia, ni de un ministro de Estado, al menos por mi parte. Pero yo y todos los magistrados sí hemos recibido la visita del ex ministro de salud Luis Solari y él nos ha hecho una exposición a la mayoría de los magistrados”, explicó.