TUCUMÁN,
El Arzobispo de Tucumán, Mons. Luis Villalba, resaltó que la Iglesia defiende la dignidad de la mujer y denuncia las agresiones contra ella, ante unos 40 mil fieles que se reunieron en la plaza Independencia, frente a la Catedral, para participar en la Misa por la Virgen de las Mercedes, Patrona de la arquidiócesis y Generala del Ejército Argentino.
En su homilía el Prelado explicó que la Virgen María es "el arquetipo de la auténtica promoción femenina" así como "el nuevo principio de la dignidad y vocación de la mujer: de todas y cada una de las mujeres".
Seguidamente explicó que "la mujer, como el hombre, es imagen de Dios" y aclaró que "la igualdad de dignidad no significa ser idéntica al hombre. Esto sólo empobrecería a la mujer y a toda la sociedad, perdiendo la riqueza única y los valores propios de la femineidad".
"La Iglesia trabaja por el afianzamiento de la dignidad y la valoración de la mujer" y trabaja en su promoción humana y cristiana ayudándola "a salir de situaciones de marginación en que puede encontrarse y capacitándola para su misión en la comunidad eclesial y en el mundo. La Iglesia trabaja por favorecer los medios que garanticen una vida digna para las mujeres, especialmente para las que se encuentran en situaciones difíciles: separadas, madres solteras, mujeres prostituidas".
Tras señalar que la Iglesia denuncia "las violaciones contra la justicia y la dignidad de la mujer", el Arzobispo resaltó su papel fundamental "como madre, defensora de la vida y educadora del hogar" y destacó la necesidad de "valorar a la mujer en todos los ámbitos de la vida".
En especial se refirió a "su vocación a la maternidad", de la que "brota la singular relación de la mujer con la vida humana". "La misión materna es también fundamento de una responsabilidad particular. La madre está puesta como protectora de la vida", agregó.