CARACAS,
Los Obispos de la Comisión de Justicia y Paz Nacional de la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV), deploraron la violación de los derechos humanos de quienes en días recientes han sido detenidos por "ejercer el derecho ciudadano a la manifestación", sin que haya mediado una investigación previa para "crear precedentes que atemoricen al resto de ciudadanos".
Ante estos hechos promovidos por el gobierno de Hugo Chávez, el comunicado firmado por el Presidente de esta comisión y Vicepresidente de la CEV, Mons. Roberto Luckert, expresa la preocupación de los prelados dado que estas detenciones se han dado en el contexto de protestas públicas.
"El Estado ha vuelto a la práctica de la detención preventiva, al 'detener para investigar' antes que 'investigar para detener'. Acciones que nos retrotraen a etapas que creíamos felizmente superadas", agrega el texto.
El comunicado indica además que es "sumamente preocupante que los jueces de control estén decretando medidas de privación de libertad a ser cumplidas en establecimientos penitenciarios ordinarios (…) en los cuales no existe clasificación entre procesados y sentenciados, ni existen garantías de respeto a la integridad física y a la vida de las personas detenidas".
"Al escoger como lugares de detención a penales pública y notoriamente inseguros pereciera practicarse un evidente afán por crear precedentes que atemoricen al resto de los ciudadanos", advierte.
Por ello, "denunciamos y repudiamos todo tipo de atentado contra la dignidad de la persona humana, y contra el trabajo honorable de organizaciones que por años han trabajado en la defensa de los derechos humanos. La difamación, el allanamiento, los ataques orales y escritos son acciones que descalifican y denigran la fama y la moral de organizaciones serias y comprometidas".