BOGOTÁ,
El Presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC), Mons. Rubén Salazar, exhortó al Gobierno y a la guerrilla de las FARC a dejar de jugar con los secuestrados y pidió que estos sean “liberados inmediatamente sin ninguna contraprestación”.
Tras comentar que resulta muy triste la situación actual de los secuestrados, el también Arzobispo de Barranquilla recordó que el secuestro es un delito, constituye un atropello intolerable y que esta situación debe terminar.
"Yo pienso que con esta situación no se puede seguir jugando, no se pueden seguir sacando dividendos políticos, no se pueden seguir buscando oportunidades en ningún sentido. Hay un atropello a la dignidad humana y ese atropello tiene que cesar, por eso todos los secuestrados deberían ser liberados inmediatamente sin ninguna contraprestación", dijo el Prelado por lo que nuevamente ofreció la ayuda de la Iglesia Católica para la tarea de facilitación y mediación.
Desplazados
De otro lado, y en el marco del Congreso “Inclusión social con enfoque psicosocial” que se realiza este 11 y 12 de septiembre como parte de la Semana por la Paz que organiza el Secretariado Nacional de Pastoral Social (SNPS/Cáritas Colombiana), el Arzobispo expresó su preocupación por la difícil situación de los desplazados a causa del conflicto interno.
“En Colombia desafortunadamente ha ido creciendo un grupo de personas excluidas del acceso a los derechos y la posibilidad de cumplir sus deberes. Por ello es necesario encontrar caminos para que esas personas dejen de ser víctimas y vuelvan a ser ciudadanos de primer rango”, dijo el Presidente de la CEC.