LIMA,
La responsable del voluntariado y coordinadora de estudiantes internacionales de La Salle Centro Universitario de Madrid (España), Sara Tamarit Guerola, señaló que el voluntariado que realizó junto con siete compatriotas en la zona pobre de Manchay en Lima (Perú) fue una "experiencia que te remueve" y que "cambió mi vida".
Según señala el Arzobispado de Lima, los voluntarios brindaron apoyo educativo durante el mes pasado a las siete Cunas Jardín de la Parroquia Espíritu Santo; al Centro Educativo Parroquial Virgen del Rosario; a la Escuela para niños con necesidades educativas especiales; al Centro Parroquial San Pablo; al Colegio Nacional Santa Rosa de Collanac; y algunas casas de adultos mayores de la zona de Manchay.
Durante su estadía en la zona, con 60 mil habitantes en su mayoría de pobreza extrema, los voluntarios brindaron programas de "capacitación a los profesores en temas como problemas de aprendizaje, animación a la lectura, orientación vocacional, trabajo colaborativo del profesorado, dislalia, pragmática y mutismo"; entre otros.
Una de las voluntarias españolas, Maribel Carrasco Gómez, señaló que pese a que "en Manchay no tienen nada, te lo dan todo"; y agradeció la labor y esfuerzo que realiza, con apoyo del Arzobispado de Lima y del Cardenal Juan Luis Cipriani Thorne, el Padre José Chuquillanqui, "porque se está encargando de la gente que no tiene, de ofrecer una educación a los niños y jóvenes, de darles un trabajo y un futuro, así como de alimentar y atender a los ancianos".
El voluntariado en esta zona de Lima se desarrolla gracias al convenio entre La Salle Centro Universitario de España y la Parroquia Espíritu Santo en Perú.
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