ROMA,
El Arzobispo de Colonia (Alemania), Cardenal Joachim Meisner, explicó que la esperanza es el único antídoto que puede salvar a Europa del "virus" de la depresión colectiva y solo los cristianos pueden procurarlo pero solo tras haber descubierto su propia identidad.
Así lo expresó el Purpurado en la homilía de la Misa que celebró en la localidad alemana de Essen en ocasión de los 1200 años de la muerte de San Ludgerus, primer Obispo de Münster.
Para el Cardenal el asunto fundamental es "volver siempre a las raíces de la fe en Cristo" ya que "el mundo necesita cristianos capaces de vivir la propia fe y que las palabras sigan a los hechos". Para realizar esta misión en todos los ambientes de la vida, agregó, "es necesario primero que nada saber qué cosa se anuncia y qué cosa se testimonia".
Poniendo como ejemplo al Santo Obispo, el Purpurado resaltó la importancia de seguir alimentando con "la sustancia cristiana el núcleo de la cultura occidental" ante las diversas amenazas que aparecen en medio de la sociedad.
Además de la necesaria defensa de la vida y la familia, el Arzobispo indicó que Europa debería "prevenir en las propias legislaciones la promoción de la libertad religiosa porque ésta funda y garantiza los derechos del hombre y la tolerancia".
"Nuestro tiempo está lleno de religiosidad pero privado de la fe en Dios. ¡Y nosotros los cristianos no somos una excepción! Es clara la falta de conocimiento de Cristo", añadió.