ROMA,
En la celebración de la "Jornada por la paz y la armonía" en distintos estados de India, el Arzobispo de Cuttack-Bhubaneswar, Mons. Raphael Cheenath, señaló que "hechos como la violencia anticristiana no deben suceder nunca más"; al conmemorarse un año de los ataques perpetrados por extremistas hindúes en el estado de Orissa que cobraron la vida de más de 70 personas.
En sus palabras recogidas por L'Osservatore Romano, el Prelado indicó que "el mundo debe conocer qué cosa significa la paz y la armonía y nosotros debemos combatir las tendencias que generan tales crímenes extremos. La violencia y el derramamiento de sangre llevan solo a la destrucción de la humanidad. Debemos trabajar por el amor, que significa trabajar por la paz".
"Ahora que ha pasado un año –dijo luego el Arzobispo– muchas personas viven todavía en los campos como prófugos y son más numerosas las que han encontrado refugio en las ciudades de los estados vecinos. Muchas otras han podido regresar a casas, pero nuestro pueblo vive bajo amenaza".
Tras pedir luego que los fundamentalistas hindúes no se opongan la reconstrucción de las iglesias destruidas por ellos, el Prelado advirtió que "hasta que los criminales involucrados estén libres, ayudados por la inercia de quien debería garantizar la protección de las minorías, los ataques contra el pueblo indefenso e inocente continuarán".
Los extremistas, alertó finalmente, "no retrocederán y seguirán perseverando en su intento de cancelar toda huella de cristianismo en Orissa. Pero la misión continúa y la violencia no nos detendrá. La cruz de Cristo es nuestra fuerza y nuestra esperanza".
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