VATICANO,
Rajiv Janine es un joven de 18 años de Sri Lanka que tras un accidente ferroviario sufrió la amputación de sus brazos y piernas. Esta mañana pudo saludar y recibir la bendición del Papa Benedicto XVI tras la Audiencia General con lo que ha visto cumplido el sueño de toda una vida.
Rajiv, quien ha recibido la colaboración de un grupo de italianos para las prótesis que necesita, pudo contarle su historia al Santo Padre; a quien también le pidió una bendición especial para su hermano que dentro de poco será ordenado sacerdote y para su hermana que es religiosa en Filipinas. Junto a él estuvo su hermana mayor quien siempre lo acompaña para asistirlo.
La ayuda recibida por este joven, explica el P. Giuseppe Iasso, es parte de una serie de proyectos de solidaridad en Sri Lanka que un grupo de entusiastas italianos han puesto en marcha para ayudar a quienes fueron afectados por el tsunami de 2004.
El dinero, dice el sacerdote a L'Osservatore Romano, "fue reunido enviando cartas y tocando las puertas de los párrocos y las familias hasta que llegaron los 40 mil euros (para las prótesis que ya utiliza). Muchos niños han vaciado sus alcancías e incluso una anciana mujer en silla de ruedas ha colaborado con sus ahorros".
Este especial y afectuoso encuentro entre el Papa Benedicto XVI y Rajiv es el resultado de una carta que enviara el sacerdote al Santo Padre, contándole la historia del muchacho.
"Le he abierto mi corazón de sacerdote y Benedicto XVI quiso encontrarse personalmente con este joven para alentarlo. El testimonio de Rajiv, con su serenidad pese al dolor por la discapacidad; es para todos los que sufren una invitación a no desalentarse y a no perder nunca la esperanza", concluye.